La Comunidad de Madrid con su Presidenta al frente es un claro ejemplo del grado de domesticación y servidumbre al que puede llegar el hombre. En ella tienen lugar actos en los que el desprecio a los derechos de las personas alcanza cotas difícilmente superables y sin embargo, esta mujer, no ya escuálida de cuerpo sino de espíritu, que es lo terrible, sigue obteniendo el poder una legislatura tras otra.
Si no le importa la sanidad ni la educación públicas, si su persecución hacia los colectivos más desprotegidos y marginados es continua y tenaz, ¿que consideración va a tener hacia los animales?.
Esperanza Aguirre se preocupa de aumentar el presupuesto para la tauromaquia porque el sufrimiento de un toro le trae sin cuidado y hasta disfruta con él. Quién no tiene capacidad para compadecerse ante el dolor de un animal por supuesto que no dispone de ese valor hacia ninguna especie, así que es lógico que en en ese Centro que está bajo su jurisdicción, se sacrifiquen animales con la misma alegría que se conceden licencias de obra entre los amiguetes adinerados, los mismos que luego sufragan los gastos de campaña y todo lo que sea necesario. De los perros lo único que puede conseguir es acáso un gruñido y un merecido mordisco, aunque posiblemente al can tal acción le costaría una grave intoxicación por envenenamiento.
A las personas a las que incomprensiblemente no les importan los animales, debería al menos preocuparles el comportamientos FASCISTA de esta mujer y su cohorte de colaboradores, pero estamos demasiado alienados para darnos cuenta, así que este esperpento humano seguirá siendo elegido y los animales racionales e irracionales de la Comunidad de Madrid, continuarán padeciendo las consecuencias de que esta aplicada heredera del franquismo siga gobernando.
Ricardo, te voy a contar un pequeño suceso que al final vendrá al caso:
Iba en el metro por la mañana, camino del trabajo, y como cada día me encontré con el adolescente medio muerto de hambre pidiendo una ayuda (uno de tantos, porque quien viva en Barcelona y use el transporte público conocerá la rutina de muchas personas sin hogar buscando unas monedas). En este momento un hombre del asiento de enfrente se planta delante del chico y le dice:
"Oye, vete al ayuntamiento a pedir que para eso pago yo mis impuestos".
¿Será posible que se lo crea y todo? Que vaya al ayuntamiento de Barcelona, ¿a qué exactamente? Son inmigrantes ilegales, sin papeles, sin hogar, sin trabajo, sin dinero. Si a nosotros, ciudadanos reconocidos y debidamente fichados e identificados ya se nos ponen todo tipo de trabas para cualquier gestión burocrática, ¿qué espera este hombre que le den al pobre chico en el ayuntamiento?
Cosas así me hacen hervir la sangre de impotencia, y me recuerdan que gran parte de la población vive imnersa en un estado de ignorancia y resignación.
Entonces no me sorprende que les dé igual si perros y gatos son asesinados por toneladas, porque no son capaces de ver más allá de sus propias narices.
La esperpética Esperanza no es más que la condensación de este egoísmo apático. ¿Qué más tenemos que hacer para que las personas despierten y se impliquen?
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Historias de animales que salen de lo común............Linde5otroenfoque...................................................................................................................
2 comentarios:
La Comunidad de Madrid con su Presidenta al frente es un claro ejemplo del grado de domesticación y servidumbre al que puede llegar el hombre. En ella tienen lugar actos en los que el desprecio a los derechos de las personas alcanza cotas difícilmente superables y sin embargo, esta mujer, no ya escuálida de cuerpo sino de espíritu, que es lo terrible, sigue obteniendo el poder una legislatura tras otra.
Si no le importa la sanidad ni la educación públicas, si su persecución hacia los colectivos más desprotegidos y marginados es continua y tenaz, ¿que consideración va a tener hacia los animales?.
Esperanza Aguirre se preocupa de aumentar el presupuesto para la tauromaquia porque el sufrimiento de un toro le trae sin cuidado y hasta disfruta con él. Quién no tiene capacidad para compadecerse ante el dolor de un animal por supuesto que no dispone de ese valor hacia ninguna especie, así que es lógico que en en ese Centro que está bajo su jurisdicción, se sacrifiquen animales con la misma alegría que se conceden licencias de obra entre los amiguetes adinerados, los mismos que luego sufragan los gastos de campaña y todo lo que sea necesario. De los perros lo único que puede conseguir es acáso un gruñido y un merecido mordisco, aunque posiblemente al can tal acción le costaría una grave intoxicación por envenenamiento.
A las personas a las que incomprensiblemente no les importan los animales, debería al menos preocuparles el comportamientos FASCISTA de esta mujer y su cohorte de colaboradores, pero estamos demasiado alienados para darnos cuenta, así que este esperpento humano seguirá siendo elegido y los animales racionales e irracionales de la Comunidad de Madrid, continuarán padeciendo las consecuencias de que esta aplicada heredera del franquismo siga gobernando.
Gracias y Salud amigo Ricardo.
Julio
Ricardo, te voy a contar un pequeño suceso que al final vendrá al caso:
Iba en el metro por la mañana, camino del trabajo, y como cada día me encontré con el adolescente medio muerto de hambre pidiendo una ayuda (uno de tantos, porque quien viva en Barcelona y use el transporte público conocerá la rutina de muchas personas sin hogar buscando unas monedas).
En este momento un hombre del asiento de enfrente se planta delante del chico y le dice:
"Oye, vete al ayuntamiento a pedir que para eso pago yo mis impuestos".
¿Será posible que se lo crea y todo?
Que vaya al ayuntamiento de Barcelona, ¿a qué exactamente?
Son inmigrantes ilegales, sin papeles, sin hogar, sin trabajo, sin dinero.
Si a nosotros, ciudadanos reconocidos y debidamente fichados e identificados ya se nos ponen todo tipo de trabas para cualquier gestión burocrática, ¿qué espera este hombre que le den al pobre chico en el ayuntamiento?
Cosas así me hacen hervir la sangre de impotencia, y me recuerdan que gran parte de la población vive imnersa en un estado de ignorancia y resignación.
Entonces no me sorprende que les dé igual si perros y gatos son asesinados por toneladas, porque no son capaces de ver más allá de sus propias narices.
La esperpética Esperanza no es más que la condensación de este egoísmo apático.
¿Qué más tenemos que hacer para que las personas despierten y se impliquen?
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